Un tribunal dominicano ordenó un año de prisión preventiva contra siete personas acusadas de explotación sexual de mujeres, mientras las autoridades repatriaron a igual número de estadounidenses detenidos en la casa donde las víctimas, en su mayoría menores de edad, eran prostituidas, informó el ministerio público. Se trata de uno de los mayores casos de explotación sexual de menores que ha sido desmantelado en los últimos meses en una zona turística de República Dominicana. Jonathan Baró, procurador contra la trata de personas, explicó a The Associated Press que los siete estadounidenses fueron repatriados a través de un acuerdo con las autoridades de Estados Unidos para que sean procesados mediante la denominada Ley Protect Act de 2003, contra la explotación sexual infantil.
Los siete estadounidenses, cuyas identidades y ciudades de origen no fueron difundidas, habían ingresado a República Dominicana como turistas y fueron detenidos cuando participaban en una fiesta donde había prostitución de menores.