NUEVA YORK._ Una monja residente en Buffalo (Nueva York) y de 68 años de edad, fue condenada ayer lunes a tres meses en la cárcel, luego que se declarara culpable en una corte de robar $128.000 dólares de los fondos de dos congregaciones para mantener su adicción al juego de póker. La "hermana" Mary Anne Rapp de la iglesia católica, apostólica y romana, también que trabajar 100 horas en servicios comunitarios cuando salga de los barrotes. Ella llevaba 50 años en el servicio religioso. La monja, fue convicta en abril de este año por el robo del monto en efectivo a las parroquias de Santa María en el poblado de Holley y San Marcos en Kendall. El dinero lo robó en diferentes cantidades entre el 2006 y el 2011, dijeron los fiscales. Además deberá pagar $128.000 dólares como restitución a los fondos robados en sendas iglesias. La monja quedó en evidencia con el robo, cuando se dio a conocer una auditoría. Los investigadores dijeron que la religiosa usaba el dinero hurtado para poder seguir jugando en casinos situados en el Oeste de Nueva York.