El presidente del Senado pide que la justicia actúe con mano dura frente a delincuentes
SANTO DOMINGO. A pocos días de que el Presidente autorizó que miembros de las Fuerzas Armadas refuercen a la Policía Nacional en el patrullaje, la delincuencia se ha ensañado en contra de los uniformados, y en los últimos días han asesinado a tres, incluyendo una miembro de la seguridad presidencial, y herido a otros cinco en intentos de atracos. El miércoles, Arturo Santiago Alcántara, actualmente preso y fichado por droga, y William Santana, prófugo, mataron a balazos a la segundo teniente Suleyka Ponciano Solano, del Ejército Nacional, miembro del Departamento Nacional de Investigaciones y asignada a la seguridad de la familia presidencial. La delincuencia volvió a atacar ayer a otro oficial de la cercanía del Presidente. La víctima fue Jhonny Vásquez Tellerías, quien es miembro del Cuerpo de Ayudantes Militares, órgano encargado de la seguridad del mandatario y su familia. El segundo teniente de la Policía está ingresado en un centro asistencial de San Pedro de Macorís, tras ser herido en distintas partes del cuerpo por dos hombres que intentaron despojarlo de sus pertenencias en momentos en que regresaba a su casa en el barrio Buenos Aires de la referida ciudad. Asimismo, el pasado 30 de junio, dos hombres, Brando Cabral de Jesús, de 22 años, y Eduardo Arias, de 24, ambos presos, mataron al primer teniente de la Fuerza Aérea Dominicana (FAD), Manuel de Jesús Sosa Jiménez, catalogado como uno de los mejores entrenadores de boxeo del país. Mientras que el 15 del mismo mes, varios hombres mataron al oficial Rafael González, cuando se resistió a ser atracado en Tamayo.