Reconoce que choca con intereses fuertes, pero no se quedará de brazos cruzados Santo Domingo. El presidente Danilo Medina advirtió ayer que a pesar de estar "chocando con intereses muy fuertes", y que tiene mucha oposición con lo que quiere hacer, no se quedará con los "brazos cruzados", ante el problema eléctrico. Sostuvo que cada año, el Estado está tirando al "zafacón" US$1,500 millones, para que empresas (generadoras) reciban beneficios y seguridad de sus inversiones, mientras la ciudadanía recibe un servicio de baja calidad. "Nosotros hemos llegado a la conclusión, de que la única forma de resolver el problema eléctrico es que el Estado intervenga, porque hace tiempo que en República Dominicana, a menos que se haga por pedido, no se invierte un centavo en generación", sostuvo. Medina entiende que en las condiciones que funciona el sector eléctrico del país ningún banco va a prestar grandes cantidades de dinero, por la incertidumbre de saber que "si ese señor que tomó el dinero prestado podrá pagarlo", en función del mercado eléctrico de la República Dominicana. "El Estado tiene que intervenir, aunque sea en una primera fase, y luego se retira. Y yo estoy decidido a construir nuevas plantas para abaratar el costo y economizar esos US$1,500 millones, que le pueden servir al pueblo dominicano para mejorar la educación y la salud". Este mes, la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE) lanzó un proceso de licitación pública internacional para la selección del contratista que ejecutará los trabajos de ingeniería, procura y construcción de dos unidades termoeléctricas en base a carbón con una capacidad de 300 MW cada una.